Existen infinidad de soluciones para cubrir una parte del espacio exterior de una vivienda. La instalación de una pérgola es un buen compromiso entre la veranda, que está completamente cerrada, y el toldo desmontable. Si no estás seguro de si comprar una veranda o una pérgola, igual te estás preguntando si es posible cerrar esta última. ¡Todos podemos cambiar de opinión! A continuación te explicamos cómo cerrar tu futura pérgola.
Cerrar una pérgola: ¡opta por una pérgola evolutiva!
Instalar una pérgola que pueda transformarse en una veranda en el futuro, parece un sueño, ¿no? ¡Pues no es tan inalcanzable! Al optar por una pérgola evolutiva, estás abriendo la puerta a varias alternativas. Puedes cerrarla completamente instalando cristaleras. Y, si el tamaño lo permite, también convertir solo una parte en una veranda, manteniendo un espacio abierto. Esta solución existe tanto para las pérgolas bioclimáticas como para las clásicas. Construidas en su mayoría en aluminio, las pérgolas evolutivas son modernas. Ofrecen una amplia gama de equipamientos y un muy buen aislamiento. ¡Tu carpa se convierte en un auténtico espacio habitable! Perfectamente resistente a las inclemencias del tiempo, el aluminio es el material elegido para tus instalaciones de exterior. Además, se puede adaptar a cualquier diseño y requiere muy pocos cuidados de mantenimiento.
Cierra tu pérgola con estores motorizados
La instalación de estores verticales motorizados es una opción que puede añadirse posteriormente. Protege del sol y del viento, a la vez que añaden más privacidad a la zona. Las estores verticales se pueden montar tanto en pérgolas bioclimáticas como en pérgolas clásicas.
Tanto si tu nuevo espacio está unido a tu casa como si es independiente, el estor es invisible cuando se enrolla. Puedes optar por un estor lateral completamente opaco o por uno translúcido, que deja pasar la luz.
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¿Te gusta la opción de los estores verticales, pero te gustaría mantener la luminosidad del espacio? Las cristaleras también pueden añadirse después de la instalación de tu pérgola. Permiten disfrutar de la luz natural manteniéndose protegido del frío y las inclemencias meteorológicas. Son ideales para las pérgolas bioclimáticas que, gracias a las lamas orientables, permiten controlar la ventilación. Menos conocidas son las cristaleras correderas panorámicas que permiten disfrutar de las vistas cuando la pérgola está abierta.
