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¿Cómo plantar clemátides en una pérgola?

Originalmente, las pérgolas se diseñaban para cultivar plantas enredaderas. Cubrir de plantas la cubierta de una pérgola añade un toque decorativo y aromático a tu jardín. La clemátide, con sus coloridos racimos de flores y su aroma a azahar y vainilla, gusta mucho. Estos son nuestros consejos para plantar con éxito una clemátide en una pérgola.

¿Qué es una clemátide para pérgola?

La clemátide es una de las plantas enredaderas más populares. ¡Y con razón! Hay muchos tipos diferentes de clemátides de hoja perenne. Hay plantas con flores pequeñas (de 3 a 7 cm), flores grandes (de 10 a 20 cm), algunas con forma de campana, otras con forma de estrella. En cuanto a los colores, entre el rosa, el violeta, el negro, el blanco, el rojo y el azul, ¡te costará elegir!

Esta hermosa enredadera puede ser caprichosa, pero si se planta y se cuida adecuadamente, decorará tu pérgola maravillosamente. Además, como esta planta perenne aguanta muy bien las variaciones meteorológicas, es bastante fácil de cuidar y crece rápidamente. 

Por supuesto, como ocurre con muchas plantas enredaderas, hay diversas variedades de clemátide. Para una pérgola, elige una que sea fuerte, que te permita cubrir tu espacio resguardado rápidamente. Como sucede con los rosales trepadores, existen clemátides de floración repetitiva y de floración única. Las plantas de floración repetitiva florecen varias veces al año, las otras florecen solo una vez y se podan justo después de la floración.

Plantar una clemátide en una pérgola

¿Es exigente la clemátide? Lo importante es plantarla en el lugar y el momento adecuados

Puedes elegir cultivarla en tierra o en una maceta, y en ambos casos florecerá. Sin embargo, la calidad del suelo y su exposición son esenciales para evitar las enfermedades. Elige un lugar soleado. La orientación sur u oeste es más que recomendable. Sin embargo, la clemátide necesita tener los pies en la sombra. Puedes colocar una teja en su base si hace mucho calor. Si la plantas cerca de un pequeño arbusto o seto también tendrá la sombra necesaria. 

En cuanto al suelo, a las clemátides les gusta que sea fresco y esté bien drenado. Una tierra rica obtenida añadiendo tierra de relleno enriquecida con mantillo o tierra de brezo le dará todos los ingredientes necesarios para su buen desarrollo. Evita plantar una clemátide en suelos demasiado arcillosos. La arcilla y el limo son verdaderos enemigos. Si este es el caso de tu tierra, lo mejor entonces será plantarla en una maceta. 

¿Cuándo plantar una clemátide en una pérgola?

Las clemátides se cultivan en contenedores. Así que dan ganas de decir que ningún momento es mejor que otro para plantarlas. Sin embargo, como estas enredaderas son delicadas, es mejor plantarlas de septiembre a abril, evitando el periodo de heladas.

¿Cómo plantar una clemátide?

¿Se reúnen todas las condiciones y estás listo para plantar tu clemátide? 

A continuación, te ofrecemos algunas instrucciones para que tu planta enredadera crezca a gusto y se desarrolle bien:

  • el hoyo de plantación debe estar a 20 o 30 cm de un pilar de la pérgola;
  • debe tener entre 50 y 60 cm de profundidad y el doble de ancho que el cepellón;
  • empapa el cepellón de la clemátide hasta que no salgan burbujas;
  • asegura un buen drenaje colocando grava en el fondo del hoyo;
  • cuando la clemátide esté bien humedecida, sácala del tiesto con cuidado;
  • colócala al bies, inclinada hacia su soporte, puedes ayudarla con un tutor;
  • no entierres los tallos a más de 10 cm de profundidad, o tendrás que esperar mucho hasta que florezca;
  • una vez que tu planta vivaz esté en tierra, añade la mezcla de mantillo + tierra de jardín y apisona un poco;
  • puedes formar un alcorque de riego alrededor del pie;
  • no exageres con el riego. A las clemátides (como a muchas trepadoras) no les gusta el exceso de agua;
  • cubre el pie con una teja o tabla.

Cuidado de las clemátides en una pérgola

Cuanto mejor plantada esté tu clemátide, más fácil será su cuidado. Cada año, proporciónale un abono adecuado o un compost que mezclarás con su tierra cavando un poco. Para mantener el suelo fresco, puedes cubrirlo con pajote. 

Cuando las flores se hayan marchitado, poda las ramas, ¡la planta florecerá con más fuerza!

En cuanto a las enfermedades, la más habitual es la enfermedad criptogámica Ascochyta Clematidina. Se trata de un hongo que hace que las clemátides se sequen repentina y brutalmente. Pero si has utilizado un mantillo rico y sano durante la plantación, y has respetado las necesidades de la planta, ¡no tendrás este problema!

Recuerda también que debes proteger tus clemátides durante el invierno. Para ello, utiliza un velo de hibernación y envuélvelo alrededor de la planta cubriendo una altura de 50 cm. 

¿Lo sabías? Un exceso de abono favorece el crecimiento de las hojas en detrimento de las flores. 

Plantas enredaderas para combinar con la clemátide

Muchas plantas enredaderas se combinan perfectamente en una pérgola. La combinación de diferentes especies permite que crezcan mucho y a gusto y la multiplicación de colores y formas es muy decorativa. 

Las mejores trepadoras o enredaderas para pérgola serían: 

  • el rosal trepador, que puede ser de floración repetitiva o de floración única. Existen diversas variedades;
  • la glicina, que florece al mismo tiempo que la clemátide;
  • la hortensia trepadora cubre de forma muy bella y el color blanco de sus flores hace que resalte la clemátide;
  • la parra virgen es una de las plantas ornamentales más utilizadas;
  • el jazmín, cuyo color amarillo combina divinamente con todos los colores de las clemátides;
  • el lúpulo dorado, que florece a finales del verano;
  • y, por supuesto, la combinación de varias especies de clemátides crea una armonía natural.

Ahora ya sabes cómo cubrir tu pérgola con clemátides. No son tan difíciles de cuidar. El quid está en la plantación y su exposición.