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¿Qué es una pérgola bioclimática?

La pérgola bioclimática es la versión de pérgola más modulable. Con ella, puedes estar tanto al sol como a la sombra. Las lamas inclinables permiten cambiar el aspecto de la cubierta en función de las condiciones meteorológicas o del sol.

¿Cuál es el principio de una pérgola bioclimática?

Como todas las pérgolas, la pérgola bioclimática tiene un sistema de cubierta. Pero donde antes había que elegir entre una cubierta totalmente cerrada o una con solo unas vigas, ahora tienes a tu alcance todas las opciones.

Las lamas de la cubierta, a menudo de aluminio, pueden inclinarse de 0 a 135°. A 90°, en posición vertical, dejan pasar los rayos del sol, filtrándolos apenas un poco. Pero cuando hace demasiado calor, o cuando llueve, las lamas se colocan en horizontal para proporcionar una cubierta completamente hermética. Tus muebles de jardín estarán protegidos y disfrutarás de tu terraza tanto si el sol está en su punto álgido como si un chaparrón intenta llevarte al interior.

fonctionnement pergola bioclimatique¿Cómo funciona una pérgola bioclimática?

Hay tres opciones para variar la inclinación de las lamas de la cubierta:

O bien, se orientan accionando una manivela,
O se accionan mediante un motor y un mando a distancia,
O están equipadas con sensores que las cierran automáticamente, por ejemplo en caso de lluvia.

 

¿Por qué se llama pérgola bioclimática?

La pérgola bioclimática aumenta considerablemente el confort en una terraza, ya que se adapta al tiempo que hace y a las estaciones del año.

Sin embargo, esta no es la única ventaja: si la pérgola está adosada a un edificio, este también disfrutará de las variaciones provocadas por la inclinación de las lamas. Esto significa que tu casa estará más expuesta al sol en invierno, lo que te permitirá ganar luminosidad y, por tanto, en temperatura. A la inversa, las habitaciones contiguas a la pérgola también estarán a la sombra en verano, lo que te permitirá refrescarlas y reducir la necesidad de aire acondicionado.

Por eso se habla de un enfoque bioclimático, cuyo objetivo es aprovechar al máximo el entorno en función del clima.

¿Cuáles son las ventajas de una pérgola bioclimática?

Aunque la ventaja de proteger del sol o de la lluvia es evidente, dependiendo de la orientación de las lamas, también hay que tener en cuenta otros aspectos.

Así, el hecho de poder inclinar las lamas proyectando sombra, pero sin cerrarlas del todo, favorece la circulación del aire. Esto crea esas corrientes de aire tan agradables cuando sube la temperatura. Cuando están cerradas, las lamas resisten a vientos de hasta 120 km/h, lo que las hace aptas para su instalación en todas las regiones de Francia.

Por el contrario, cuando las lamas se colocan para dejar pasar el sol, este reverbera en el aluminio y sus rayos son más potentes. La luz que entre en tu casa será más intensa, lo que se agradecerá durante los días soleados de invierno.

Añadiendo cerramientos laterales a tu pérgola, casi tendrás una habitación extra, a un precio razonable. Sobre todo porque, además de la iluminación, es posible añadir sistemas de calefacción a tu pérgola. De ese modo podrás utilizarla en todas las épocas del año. Y, además, se adaptará a cada una de ellos.

Por otra parte, la mayoría de las pérgolas bioclimáticas son de aluminio. Este material es uno de los más duraderos y fáciles de cuidar. La estructura resistirá al paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas, pero conservará la prestancia de lo nuevo.

La pérgola bioclimática es la versión más lograda de la pérgola, especialmente porque ayuda a ahorrar energía en tu vivienda.

¿Cómo elegir tu pérgola?

Obtén más información sobre los diferentes tipos de pérgolas en nuestra guía especializada.

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